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¿Afecta el calor a tu estado de ánimo?

Ya hemos hablado en numerosas ocasiones de cómo actuar para que el calor no afecte a nuestra salud, así de cómo poder afrontarlo para que las altas temperaturas no influyan en nuestro trabajo.

Probablemente hayas notado que estos días te encuentras de peor humor, estás desganado, sin apetito y más susceptible. Y es que, aunque lo recibamos con ganas tras una época de lluvia y frío y lo asociemos a vacaciones y playa, un exceso de calor en nuestra rutina diaria suele traer consigo todo lo contrario.

La realidad es que pocas veces soportamos el calor, sobre todo cuando nos afecta emocionalmente. El calor incide en nuestro carácter y nos vuelve más irascibles, lo que repercute en las relaciones familiares y de pareja. Si además somos propensos a tener la tensión baja o a sufrir problemas circulatorios, las molestias ocasionadas por el calor nos pueden alterar de manera importante, trastornando nuestra rutina diaria.

¿Cuáles son los primeros efectos del calor a nivel psicológico?

Con el calor también tenemos menos ganas de trabajar, ya que nos sentimos más cansados, por lo que disminuye el rendimiento y la concentración. Sentimos apatía, sudamos en exceso a causa de la humedad y comemos menos.

Las altas temperaturas y la humedad que algunas veces impregna el ambiente hacen que dormir se convierta en una pesadilla, llegando a provocar incluso insomnio durante las noches de más calor. Al día siguiente, en vez de despertarnos con las pilas recién cargadas, nos notaremos ansiosos, cansados, nerviosos y con frecuentes cambios de humor. 

Trabajar con calor

Parece que ante temperaturas extremas nos cuesta más concentrarnos y, por tanto invertimos más tiempo en realizar tareas cotidianas. Asimismo, las tormentas de verano, la humedad o el fuerte viento pueden llegar a afectar a nuestro estado de ánimo. Los trabajos que implican un proceso creativo también se ven influidos por el calor y otras condiciones climatológicas.

La irritabilidad y el cansancio hacen que nuestra paciencia esté continuamente al límite y saltemos a la primera de cambio. Esto incrementa los roces en el trabajo ante situaciones de lo más corrientes. Ser conscientes de este hecho ayudará a prevenir malentendidos y situaciones desagradables.

¿Qué es la meteorosensibilidad?

La meteorosensibilidades un fenómeno que afecta a más personas de las que en un principio pudiera parecer, concretamente se estima que a una tercera parte de la población general.  Aunque va a depender de las características y circunstancias personales de cada persona, hay veces que la meteorosensibilidad puede limitar en el desempeño de sus actividades diarias.

Si bien es cierto que en principio no suelen prolongarse en el tiempo, la permanencia de los síntomas de estos trastornos deben tomarse en serio ya que podrían empeorar dando lugar a otros problemas más graves.

Por ejemplo, la bajada de la presión atmosférica puede suponer para ellos alteraciones del sueño y sensación de confusión acompañada de pérdida de concentración, memoria y reflejos.

Por su parte, los cambios bruscos de temperatura y el viento fuerte pueden llegar a causar dolores de cabeza, ansiedad e irritabilidad. De igual manera, las alteraciones de la luz también pueden influir en el estado de ánimo.

Decálogo para minimizar los efectos del calor

Para que el exceso de calor te pase la menor factura posible, y no estés todo el día de mal humor, aquí tienes una serie de consejos que te van a venir de perlas.

  1. Tener claros cuáles son los alimentos que no pueden faltar en verano
  2. Descansar más horas de las habituales y, si es posible, echarse una siesta de alrededor de 30 minutos.
  3. Reducir la actividad física en las horas de mucho calor. 
  4. Usar ropas ligeras y con colores claros. 
  5. Beber agua y zumos naturales pero nada de alcohol.
  6. No exponerse directamente al sol. 
  7. Ser consciente de que el calor afecta a nuestro carácter.
  8. Aprender a relativizar.
  9. Intentar ser menos impulsivos, especialmente a la hora de contestar.
  10. Ser más flexibles con nosotros mismos.