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Qué es el salario emocional y cuáles son sus puntos clave

A estas alturas, tanto empresas como trabajadores son conscientes de que el salario emocional ha comenzado a tener una importancia relevante en muchos aspectos. Desde el punto de vista de los últimos, llega a influir de tal manera que a la hora de decantarse por un trabajo u otro, el salario ya no es lo único a valorar. Hoy en día no solo interesa cuánto va a ganar, sino ese algo más que complete la remuneración, facilite el día a día y aumente la sensación de bienestar.

¿Qué es el salario emocional?

Si todavía no sabes qué es el salario emocional, solo tienes que apuntar la siguiente definición: es el conjunto de todas aquellas retribuciones no económicas que el trabajador puede obtener de la empresa y cuyo objetivo final es incentivarle.

¿Qué beneficios aporta a la empresa el salario emocional?

Además de todas esas facilidades asociadas al salario emocional y que benefician al empleado, hay otras muchas que de igual manera resultan beneficiosas para la empresa.

Entre estos beneficios destaca, el aumento del sentimiento de pertenencia, la retención del talento a la par que atrae a nuevos profesionales, la disminución del absentismo laboral y el aumento del rendimiento y la productividad.

¿Qué son los beneficios sociales?

Los beneficios sociales son soluciones y servicios especiales que ofrecen las empresas a sus empleados más allá del salario. Hay dos formas de implantarlos: como ayuda (a la comida, transporte o guardería) o dentro de un plan de retribución flexible.

¿Cuáles son los beneficios sociales más valorados?

  • Seguro médico. Pagarán un recibo único que podrá deducirse en el Impuesto de Sociedades sin que se tenga en cuenta como un aumento en las aportaciones a la cuenta de la Seguridad social.
  • Comida. Una importante ventaja económica para ambas partes, ya que este servicio es 100% deducible del Impuesto de Sociedades. Puede implantarlo cualquier empresa, a partir de un empleado, sin importe mínimo, logrando un aumento del compromiso de sus trabajadores y de su productividad.
  • Transporte. Se puede utilizar para la adquisición de títulos de transporte público colectivo de viajeros válidos en España, a un precio inferior al de las tarifas y muy fácilmente. Para las empresas, este servicio es 100% deducible del Impuesto de Sociedades. Para los empleados, queda exento de IRPF hasta un importe máximo de 1500€ por trabajador al año.
  • Guardería. El mayor beneficio social que las empresas pueden ofrecer a los padres y madres trabajadores con hijos en el primer ciclo de educación infantil (de 0 a 3 años). Permite obtener un ahorro fiscal de hasta 3 mensualidades al año en el pago de su Centro de Educación Infantil, y está exento de IRPF. Para las empresas, este servicio es 100% deducible del Impuesto de Sociedades.
  • Formación bonificada. Las empresas invierten sus cotizaciones en mejorar la cualificación de sus trabajadores mediante cursos bonificados vinculados al puesto de trabajo.

¿Existen otras posibilidades igual de interesantes?

Claro, como veremos más abajo, el salario emocional y las acciones de RSC pueden variar según a quien vayan dirigidas. La idea es ofrecer distintas posibilidades para que todos puedan ganar en bienestar.

  • Horario flexible: sin alterar el número de horas trabajadas a la semana, muchos empleados buscan jornadas personalizadas que les permita organizar su día a día con mayor comodidad. 
  • Espacios de distracción en la empresa: disponer de una zona de descanso donde los empleados puedan desconectar y recargar energías contribuye tanto a reforzar la productividad como a mejorar el ambiente de trabajo.
  • Gimnasio: hilando con el punto anterior, disponer de un espacio en la empresa para la práctica de la actividad física supone un ahorro de tiempo en desplazamientos y una buena manera de contribuir a la salud física y mental de los empleados.
  • Fruta fresca en la oficina: porque no hay nada más efectivo que predicar con el ejemplo, ofrecer fruta fresca y variada es una forma muy eficaz de promover la alimentación saludable.
  • Entradas a eventos culturales o deportivos.
  • Alojamiento en hoteles con tarifas especiales en el caso de empresas vinculadas al sector turístico.
  • El acceso a renting y otras ventajas financieras son también posibilidades a tener en cuenta cuando hablamos de salario emocional.

¿Afecta a todos por igual?

La percepción del salario emocional, y por tanto las acciones de RSC, cambian según la generación a la que pertenezcan los trabajadores. En este sentido se habla de:

  • Babyboomers: los nacidos antes de los 70 valoran el reconocimiento a su experiencia y beneficios relacionados con la salud, seguros y planes de jubilación.
  • Generación X: aquellos cuya fecha de nacimiento se encuentra en la década de los 70 ansían un desarrollo laboral para lo que requieren fórmulas que faciliten la conciliación laboral. Más días libres, teletrabajo o coaching son otros de sus intereses.
  • Generación Y: también conocidos como millennials, hablamos de aquellos nacidos entre 1980 y 1993. Les interesa la movilidad, los ambientes creativos, los espacios de esparcimiento, la comida saludable, un tiempo para proyectos personales y el voluntariado.
  • Generación Z: el relevo de los millennials se fija a partir de 1994. Sus objetivos irían hacia el emprendimiento, la sostenibilidad, la conectividad, el mundo digital y las redes sociales.