¿Cómo pueden las compañías garantizar que, una vez en la empresa, el talento joven esté motivado?
Una de las principales características de la Generación Z es su deseo de trabajar en proyectos con un propósito, es decir, que tengan un impacto positivo en la sociedad o en el medio ambiente. Por ello, aquellas empresas que sepan demostrar su compromiso con valores que resuenen con esta generación lograrán fidelizarlos/as. Impulsar iniciativas de responsabilidad social corporativa, programas de voluntariado o que contribuyan al bienestar común será clave.
Bienestar físico y mental
Otro aspecto crucial para motivar a la Generación Z es su necesidad de sentir que las organizaciones priorizan su bienestar físico y mental. Esta generación ha crecido en un entorno donde los temas de salud mental, como el estrés, la ansiedad y la depresión, son tratados con mayor apertura y esperan de las compañías que impulsen medidas para fomentar su salud física y mental. Por eso, las empresas que ofrezcan programas de bienestar, como acceso a terapia o iniciativas para reducir el estrés laboral, serán más atractivas.
Flexibilidad y autonomía
Esta generación valora la independencia y la capacidad de tomar decisiones por sí mismos/as. En este sentido, prefieren ambientes de trabajo donde prime la libertad y autonomía para gestionar su tiempo. El teletrabajo y flexibilidad horaria son dos beneficios fundamentales para motivar a los trabajadores/as jóvenes. Entre sus prioridades, destaca la búsqueda del equilibrio entre la vida laboral y personal. Por ello, una fórmula para mantener el compromiso es ofrecerles opciones de trabajo flexible, que les permitan, a su vez, tener un estilo de vida saludable.
Reconocimiento y crecimiento profesional
Entre las demandas de la esta generación, también se encuentran las oportunidades de crecimiento, a través de opciones de formación que se adapten de forma personalizada a sus necesidades. Además, les motiva el reconocimiento por los logros obtenidos, ya sea en forma de retroalimentación positiva o de recompensas tangibles. Contar con líderes que ofrezcan mentoría y fomenten un ambiente de aprendizaje continuo y colaborativo será esencial.
Foco en la diversidad e inclusión
Para la Generación Z, también es importante la diversidad e inclusión, ya que son personas con mucha conciencia sobre la identidad de género, la orientación sexual y la raza. Por ello, valoran los entornos laborales donde se promueve la igualdad e inclusión y se garantiza que todo el equipo sea escuchado y reconocido. Contar con estos espacios impactará directamente en su compromiso con la compañía.
Motivar a la Generación Z implica comprender y responder a sus necesidades únicas. Solo de esta forma las compañías lograrán mantener al talento joven comprometido en el largo plazo.
